No. 20 (Revisado 5/99)
La mayoría de los siquiatras de niños y adolescentes reconocen que el ambiente ideal para criar a los niños pequeños es el hogar, con sus padres y familia. El cuidado diario y directo de los padres es particularmente importante en los primeros meses de vida. Ya que la situación ideal no es siempre posible, hay que evaluar cuidadosamente el papel que juegan las guarderías de niños en los primeros años de la vida de un niño. Algunos expertos recomiendan que los padres soliciten por lo menos seis meses o más de permiso del trabajo para quedarse en la casa. Todos los expertos están de acuerdo en que, si hay que usar una guardería de niños, la cantidad y la calidad del tiempo que pasan allí los niños son significativos para su desarrollo.
Antes de seleccionar una guardería de niños, los padres deben de familiarizarse con las normas estatales para la otorgación de licencias a las guarderías. Deben de obtener referencias y observar cómo los empleados funcionan con el niño.
A veces los padres llevan a los niños a la casa de una persona que cuida uno o más niños. Los bebés y los niños menores de dos años y medio necesitan:
- Más adultos por niño de lo que requieren los niños mayores.
- Mucha atención individual.
- Que la misma persona los cuide durante un período de tiempo extenso.
- Que el que los cuida juegue y hable con ellos, les sonría, los alabe y disfrute de su compañía.
Los padres deben de buscar una persona que sea afectuosa y de buen corazón, que tenga confianza en sí misma, que sea cariñosa, atenta y que responda a los niños. La persona que cuida al niño debe de alentar el desarrollo social, el comportamiento positivo y debe saber ponerle límites al comportamiento negativo. Los padres deben de estar al tanto de la manera en que la persona que cuida a los niños se relaciona con los niños de diferentes edades. Algunas personas sólo trabajan bien con los niños en una etapa específica de desarrollo.
Es sabio por parte de los padres averiguar cuánto tiempo la persona piensa trabajar en ese lugar. Demasiados cambios de personas, varios cambios o cualquier cambio durante ciertos momentos críticos en el desarrollo del niño pueden angustiar al niño. Si los padres comienzan a pensar o a sentir que el lugar que seleccionaron ya que no es satisfactorio, deben de buscar otro lugar de cuidado. Todos los padres tienen el derecho de entrar al lugar durante el día y hacer visitas sin avisar.
Muchos niños, especialmente los mayores de tres años, pueden beneficiarse de buenas guarderías para grupos de niños donde puedan divertirse y aprender a relacionarse con otros. Los siquiatras de niños y adolescentes sugieren que se busquen servicios de guarderías que tengan:
- maestros entrenados y con experiencia, que disfruten, entiendan y sepan guiar a los niños,
- suficientes maestros y asistentes, lo ideal es uno por cada cinco niños, grupos pequeños en vez de grupos grandes si es posible. (Los estudios demuestran que es mejor tener cinco niños con una maestra que veinte niños con cuatro maestras),
- el mismo personal administrativo por largo tiempo,
- oportunidades para hacer trabajos creativos, juegos imaginativos y actividad física,
- espacio para que el niño pueda moverse con comodidad dentro y fuera,
- variedad y cantidad de materiales para dibujar y colorear y juguetes, al igual que equipo para jugar como columpios, carritos y equipo de gimnasia, etc.
Si el niño parece tener miedo de ir a la guardería, los padres deben de irlo exponiendo gradualmente al nuevo ambiente: al principio, la mamá o el papá puede ir con el niño y quedarse cerca de él mientras está jugando. Puede pasarse ahí un rato más largo cada día hasta que el niño quiera formar parte del grupo.
Aunque los padres estén preocupados de cómo le va al niño, deben de mostrar placer en ayudarle a triunfar. Si el niño demuestra un terror no acostumbrado o persistente al salir de la casa, los padres deben discutir el asunto con el pediatra.