No. 2 (Revisado 7/04)
Comer demasiado como resultado de la tensión, los malos hábitos de nutrición y las comidas de moda son problemas alimenticios comunes entre los jóvenes. Además, hay dos desórdenes siquiátricos de la alimentación, la anorexia nervosa y la bulimia, los cuales están en aumento entre las muchachas adolescentes y mujeres jóvenes y que a menudo se da en la familia. En los Estados Unidos, 10 de cada 100 mujeres jóvenes sufren de un desorden de la alimentación. Estos dos desórdenes de alimentación también se dan en los varones, pero es menos frecuente.
Los padres preguntan a menudo cómo se pueden reconocer los síntomas de la anorexia nervosa y de la bulimia. Estos desórdenes se caracterizan por la preocupación por la comida y la distorsión de la imagen del cuerpo. Desagraciadamente, muchas adolescentes esconden de su familia y amigos estos desórdenes serios y a veces fatales.
Los síntomas e indicios de peligro de la anorexia nervosa y de la bulimia incluyen lo siguiente:
- El adolescente con anorexia nervosa es típicamente un perfeccionista que saca muy buenas calificaciones en la escuela. Al mismo tiempo, se subestima, cree irracionalmente que está gruesa aun cuando se pone muy delgada. Necesita desesperadamente sentirse en control de su propia vida y cree estar en control solamente cuando le dice no a la demanda por la comida que necesita su cuerpo. En su afán por adelgazar, la joven se está matando debido a su régimen de hambre. Esto llega al punto de hacerle un daño muy serio a su cuerpo y en ocasiones hasta puede llevar a la muerte.
- Los síntomas de la bulimia son diferentes a los de la anorexia nervosa. El paciente ingiere grandes cantidades de comida de altas calorías y/o luego se purga de estas calorías haciéndose vomitar y a menudo usando laxantes. Estas comelatas pueden alternarse con dietas extremas que resultan en fluctuaciones de peso dramáticas. Los adolescentes tratan de ocultar las vomiteras haciendo correr el agua mientras están encerrados por largos períodos de tiempo en el baño. Las purgas de la bulimia presentan un peligro muy serio a la salud física del paciente, incluyendo la deshidratación, el desequilibrio hormonal, el agotamiento de minerales importantes y el daño a los órganos vitales.
Con el tratamiento comprensivo adecuado, a muchos adolescentes se les puede ayudar a eliminar estos síntomas o a controlar estos desórdenes del comer. El siquiatra de niños y adolescentes está entrenado para evaluar, diagnosticar y dar tratamiento para estos desórdenes siquiátricos. El tratamiento para los desórdenes de la alimentación generalmente requiere de un tratamiento en equipo; incluyendo la terapia individual, la terapia de familia, el trabajo con el médico primario, el trabajo con un nutricionista y los medicamentos. Muchos adolescentes sufren de otros problemas; incluyendo la depresión, la ansiedad y el abuso de substancias. Es importante el que se reconozcan estos problemas y se les dé el tratamiento apropiado.
Las investigaciones demuestran que la identificación y el tratamiento a tiempo tienen resultados favorables. Los padres que notan estos síntomas de anorexia o de bulimia en sus adolescentes deben de pedirle al médico de familia o al pediatra que los refiera a un siquiatra de niños y adolescentes.
Para información adicional puede ver: Información para la Familia:
#4 El Niño Deprimido
#79 La Obesidad en los Niños y Adolescentes
#52 Evaluación Siquiátrica Comprensiva
#60 El Desórden Obsesivo Compulsivo